ABC de la displasia de cadera
La Clínica Universidad de La Sabana, desde el programa Promoción de la Salud y de Prevención de la Enfermedad, le explica el ABC de la displasia de cadera por parte de la ortopedista y traumatóloga María Margarita Acosta Murcia. La displasia de cadera engloba las alteraciones en la formación de la cabeza femoral, el techo acetabular y los tejidos blandos de la cadera. La displasia puede dividirse en tres grupos: la luxación de la cadera, la subluxación de cadera y la displasia leve.
Los factores más comunes que desencadena esta enfermedad se notan en las madres primerizas ya que su útero no está complemente elástico y el bebé puede ubicarse en posiciones que pueden afectar el desarrollo adecuado de la cadera; también puede provocar la disminución del líquido amniótico en el útero y que impida el normal movimiento del bebé; ello podría implicar un parto en el que salgan primero las piernas del niño.
Para la detección oportuna de esta enfermedad, consulte a un pediatra durante los primeros seis meses de vida del bebé para realizar el examen físico de la cadera y; si es necesario, establecer un tratamiento adecuado. Este puede ser el uso de arnés de Pavlik, férula e incluso, en algunos casos, cirugía. Se recomienda llevar a cabo estos tratamientos antes de los 12 meses para no afectar el proceso a la hora de caminar.
No tratar a un paciente con displasia de cadera puede generar cojera, ya que puede presentarse que una pierna se haga más corta, y artrosis prematura, la cual requeriría de cirugía de reemplazos articulares.