Mitos y verdades de la higiene de manos
El programa de Promoción de la Salud y Prevención de la Enfermedad, te cuenta los mitos y verdades de la higiene en las manos a través de su vocera Ángela María Correal, enfermera epidemióloga de la Clínica Universidad de La Sabana.
1. El alcohol sirve cuando las manos tienen grasa, mugre o contaminación.
FALSO. El alcohol glicerinado no remueve la mugre, es decir, no quita las bacterias; por el contrario, adhiere más la suciedad a tus manos, haciéndose imprescindible que las laves con agua y jabón.
2. Es necesario usar alcohol inmediatamente después de lavarse las manos con agua y jabón.
FALSO. Si se realiza un adecuado lavado de manos con agua y jabón, el uso del alcohol glicerinado no genera un efecto adicional en su limpieza.
3. Si utilizo guantes, no necesito lavarme las manos.
FALSO. Los guantes no constituyen una barrera impermeable; por el contrario, cuando no se usan de manera adecuada, se convierten en foco de bacterias.
4. Puedo reducir el 100% de las bacterias al lavarme las manos.
FALSO. Existen bacterias presentes en el organismo, que hacen parte de la flora normal y por esa causa habitan de manera indefectible al ser humano y, en condiciones normales, no generan enfermedades.
5. El color del esmalte aumenta la cantidad de bacterias presentes en las manos.
FALSO. El color no afecta, pues el estado del esmalte es el que se encarga de aumentar la producción de bacterias. De igual manera, si las uñas están largas.
6. Las enfermedades de tipo respiratorio tienen mayor contagio a través de las manos.
VERDADERO. Cuando una persona estornuda, las bacterias quedan en el aire y se adhieren a las superficies; superficies donde pueden durar varios meses.
Por esta razón, tener contacto con estas superficies aumenta el riesgo de contagio. Por tu salud y la de los demás, recuerda lavar con frecuencia tus manos.